Dietas rápidas

Lograr el peso deseado requiere de un esfuerzo de la persona, buscando combatir el sobrepeso o la obesidad. Existe una tendencia natural a aumentar de peso influenciada por el tipo de alimentación contemporánea y los hábitos en las sociedades modernas.

Bajar de peso es un imperativo que nos imponemos frente a las demandas sociales, requiriendo de dietas rápidas, que sean eficaces en lograr sus objetivos.

Perder varios kilos de peso en poco tiempo puede ser una necesidad frente a un evento en particular como concurrir a una fiesta o reunión social. Especialmente para las mujeres, lucir espléndidas puede ser una necesidad, razón por la cual comienzan dietas rápidas algunas semanas antes e incluso solamente días.

Las dietas rápidas se basan de producir que el cuerpo pierda una parte importante del exceso de líquidos que contiene, de esta forma contribuye a la disminución de la inflamación corporal. Algunos hábitos de la vida diaria llevan a que el cuerpo vaya acumulando líquidos en sus tejidos, algunas dietas rápidas, basan su efectividad en producir un efecto diurético, que produce resultados temporales. 

Los mismos pueden ser fortalecidos con la eliminación de grasa corporal, para el mantenimiento luego del descenso de peso.

Para muchas personas las dietas rápidas son una buena alternativa como forma de disminuir varios centímetros e incluso un talle de ropa. Además la pérdida de líquido aumentada favorece la eliminación de productos tóxicos. Una desintoxicación mejora la elasticidad y tonalidad de la piel corporal aportando un elemento extra al descenso de peso.

Para realizar las dietas rápidas se debe tener un excelente estado de salud, no siendo recomendada para personas con alguna enfermedad crónica. Frente a la duda si las dietas rápidas son una alternativa puede consultar a su médico, el cual podrá realizar una valoración individual. Los buenos resultados obtenidos en una persona pueden no ser iguales en otra.